Una familia de ratones recoge provisiones y todos trabajan, excepto Frederick, que aparentemente no hace nada. Pero él también se aprovisiona: rayos de sol, colores, palabras...
Cuando llega el invierno, comprueban que su labor poética había sido imprescindible para que los ratones pasen mejor la crudeza de la estación invernal.
Es una tierna historia, espero que la disfrutes.Frederick
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